miércoles, 18 de marzo de 2015

#YoDono ¿y tú? #QueNoSeDiga



Desde Nuevas Generaciones de Oviedo, como organización política juvenil de hondas raíces solidarias, hemos comenzado una campaña para animar a toda la población ovetense, y en especial a la juventud, a donar sangre. Aunque la iniciativa parte del momento crítico que se vive en los hospitales asturianos por la falta de tan preciado bien, nuestra intención es concienciar a los ciudadanos de la responsabilidad de todos a contribuir en que nuestro banco de sangre no vuelva a quedar por debajo de los mínimos, a fin de que ninguna intervención hospitalaria sea cancelada de nuevo. Tanto los que disponen de unas condiciones físicas óptimas como los que no, deben entender  que donar sangre es un acto de generosidad que contribuye al bienestar y recuperación de muchas personas y a salvar vidas.

Participar de una sociedad solidaria y responsable es contribuir a un mundo mejor, y si cada uno de nosotros aportamos nuestro grano de arena lograremos una educación cívica testimonio de una sociedad moderna y avanzada.


Código ético de la donación de sangre:

Libertad: la donación es libre (usted decide donar, nadie le obliga.)
Voluntariedad: la donación es voluntaria (usted decide cuándo dona, a sabiendas de que su donación siempre es útil.)
Gratuidad: la donación es gratuita (no le reporta dinero, sólo la satisfacción de haber hecho una obra útil). Como cualquier tejido u órgano humano la sangre no puede ser tratada como una “mercancía” y por tanto nunca será objeto de comercio o beneficio.
Anonimato: la donación es anónima (usted no sabrá quién va a beneficiarse de su donación, pero sí que la recibirá un ser humano que la necesita.)
Solidaridad: la donación es un gesto solidario (a través de ella se instaura una nueva forma de comunicación y solidaridad entre los seres humanos.)
Responsable: la donación de sangre es un acto de responsabilidad.

Donar sangre es donar vida, ya que con cada bolsa que se dona se salvan 3 vidas, la sangre es un tejido líquido que no sabemos fabricar, por lo que es necesario introducirlo desde fuera. Un gesto de apenas 10 minutos que tiene una gran importancia, ya no solo para quien reciba tu sangre sino que también para uno mismo, cuando donas sangre disminuyes el riesgo de enfermedades cardiovasculares y también mediante la donación regeneras tu sangre, al mismo tiempo que colaboras entregando parte de ti, el cuerpo reacciona ante esa donación generando sangre nueva sin aditivos.